Óscar Quintanilla
Enfermero de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Talca
Socio Activo DESCHMI

Al hablar de comunicación previa al Covid, se nos vienen a la mente los múltiples congresos presenciales y reuniones de coordinación que se desarrollaban en la división de Enfermería de la Sochimi (DESCHMI). Reuniones que incluían en ese entonces un número acotado de asistentes que vivían en Santiago o podían viajar, y posteriormente la oportunidad de trabajar virtualmente en tiempo real, con una modalidad híbrida.

El año 2020 nos trajo el desafío de una nueva forma de comunicación: la virtualidad. Las jornadas de trabajo se desarrollaron en formatos totalmente alejados del contacto físico, con coordinaciones y tiempos distintos a los acostumbrados y cada uno de nosotros viviendo los desafíos que conllevó el adaptarse a este nuevo escenario, al que se le sumaba el cansancio y formas de trabajo ante nuevos desafíos epidemiológicos. En resumidas cuentas, estábamos tratando de seguir reuniéndonos, con una pandemia encima.

A partir de este desafío, logramos instaurar un equipo mucho más coordinado que al potenciarse en redes sociales, llegamos a un mayor grupo de enfermeros que trabajaban en intensivo y conocimos sus realidades.
Apoyamos propuestas de capacitaciones y nuestras reuniones de socios ya no eran de 15 o 20 personas, ni solo de Santiago. Conocimos a kinesiólogos interesados en el área y con una fuerza en conocimientos increíble.

Gracias a cada congreso virtual llegamos a todos los rincones de todas las Unidades de Paciente Crítico (UPC) a nivel nacional, e incluso internacional. Y fue así, como a inicios de junio retomamos nuestra primera actividad presencial: la Jornada de Enfermería Intensiva: Pilares en UCI, que se realizó en la Región del Maule.

Logramos reunir la infraestructura, determinar quienes darían las charlas y por, sobre todo, volver a vivir la magia de la presencialidad, de la mano de la magia de lo virtual. Hemos descubierto esta forma de ser creativos a través del sistema híbrido, que nos ha abierto las puertas para conocer más centros y kinesiólogos, lo que nos ha llevado a ser realmente inclusivos a nuestras distintas realidades.

Partimos en Talca, seguimos con Arica con las Jornadas de Actualización de Medicina Intensiva y esperamos se den más historias de actividades presenciales, no solo para la DESCHMI, sino para todos quienes integramos la Sochimi, ya que lo importante es vernos presencial, y poder llegar a todos.